RAJANDO LA LEÑA ESTÁ: La sopa chavista

El chavismo y el castrismo se van pareciendo cada vez más, pero quizá el primero haya desarrollado ya, en su relativamente corta historia, un folclor político equiparable al del segundo, y en ocasiones de colorido superior. Quien dedique algún tiempo a husmear en los medios de prensa venezolanos, dará tarde o temprano con personajes como Lina Ron, por poner el ejemplo más notorio.

Salida del seno de una de las organizaciones de matones al servicio del estado venezolano, al mejor estilo de los CDRs o las Brigadas de Respuesta Rápida cubanas, esta mujer, nunca lo suficientemente bien ponderada por el showman del Palacio de Miraflores, es una fuente inagotable de anécdotas de la más chillona picaresca política. Quien quiera saber de quién se trata, no tiene más que acudir a los propios sitios chavistas.

El sitio http://www.aporrea.org (vaya, pues aquí se empieza a aporrear desde ya) publicó el pasado día treinta una reseña sobre la columna que la militante chavista mantiene en un periódico de Caracas, y en concreto sobre un artículo dedicado a la vida privada, o más bien a la actual soltería de Hugo Chávez. En dicho artículo, siempre según aporrea.org, ya que no he podido localizarlo en toda la red, la militante y líder bolivariana reclama una mujer y una sopita de casa para su "comandante"(coronel, en todo caso).

Recordemos, a propósito, la especial intervención que una diputada a la Asamblea del Poder Popular de Cuba hizo hace un par de meses, durante el último periodo de sesiones, si no me equipo, en la cual reclamaba para sí el extraño privilegio de calzarle las pantuflas y darle una taza de caldo al convaleciente ex abogado Fidel Castro.

Para quienes quieran conocer más sobre Lina Ruz, vale el más elemental consejo de los hackers: use google, please! Pero quizá prefieran empezar por http://www.reconocelos.com. Allí encontré estas deliciosas frases de la líder popular:

"Yo, Lina Ron, mayor de edad, venezolana, en uso de mis facultades mentales, domiciliada en Caracas, de manera responsable y personal afirmó: si la contrarrevolución logra el paro energético, ya que a nivel empresarial fracasaron, y Caracas se queda sin energía y sin gasolina y por ende sin transporte que pueda traer comida a la ciudad y mis recogelatas, indigentes, mendigos, y todos mis hermanos, los pobres se quedan sin comida porque no hay como traerla, afirmo que con todo mi ascendiente sobre los pobres de los cerros, lo voy a usar para decirles que no se preocupen, que en Altamira, el Country Club, Prados del Este, La Lagunita hay comida que jode y de la buenas, exquisiteces, delicateses. Yo, por mi parte, hace mucho que no como una comida decente, así que bueno, no nos busquen que nos van a encontrar" (La Razón, 8/12/02, p. A.7).